Trapalón, trapacero, farandulero, catacaldos, son adjetivos con una connotación no muy positiva, pero que en mi casa, de toda la vida, se han usado con un matiz cariñoso para describirnos cuando nos metíamos en algun lío o hacíamos algo fuera de lo común, siempre con la mejor intención.
Ser curioso, descubrir, probar, ser el perejil de todas las salsas,...reír, vivir. Por eso, espero que Trapalonia sea un punto de encuentro entrañable para nuestras trapacerías.
Bueno, veo que somos todas de la misma opinión. Pero cómo se va a comparar? El olor de las castañas asadas, en las ciudades, es el olor del invierno: acogedor, cálido, apetitoso,... Al menos es así para mí. Espero que continúe siéndolo mucho tiempo! Besos!!
Castañas, sin duda. No soporto que nos tengamos que quedar a la fuerza con tradiciones que no son nuestras ni tienen sentido en nuestra cultura. Ni siquiera sabemos pronunciarlo!!!! Donde esté nuestra castañada, que se quiten los jalogüins ;))) Besos.
Bueno, yo voy a romper una lanza (se dice así?) por la fiesta de Halloween y por la calabaza. La una porque es eso, una fiesta, y bienvenidas sean. Tanto si es americana como si no lo es y en este caso, además no lo es, norteamérica solo la ha hecho popular, pero sus raíces son celtas. Por otro lado, la calabaza tiene propiedades antioxidantes.Disminuye el colesterol y ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
Me encantan las castañas también, mucho, y además también tienen propiedades. No hace falta eliminar ninguna si ambas cosas son buenas.
Pues yo me quedo con nuestra entrañable castañera y sus ricas castañas. Y por supuesto los panillets -que están de muerte!!!- Como dicen por aquí... no me gusta esa fiesta tan comercial. Lo suyo es comer dulces, castañas y boniatos con un buen vinito dulce y contar historias de muertos y aparecidos hasta el amanecer, pues así ha sido como siempre hemos acompañado a las ánimas en su caminar por la tierra en esa noche de difuntos. ¿Recordáis el miedo que pasábamos de pequeños con esas historias en esta noche especial? ¡Esa sí era una verdadera noche de brujas y difuntos! jejeje...
Veras, Sue: A mí me encanta la calabaza asada. Es uno de los descubrimientos que hice cuando vine a vivir a Valencia. Pero cuando me decanto por las castañas, en realidad muestro mi disconformidad con la invasión norteamericana que nos arrasa. Por supuesto que que gusta la tradición celta! De hecho creo que seguramente nuestra fiesta también derive de la suya, pero como imagen, me quedo con la castañera!! Besos!!
Yo me quedaría con las castañas, pero los niños con los que trato a diario prefieren las calabazas, así que no me queda otra que pintarles la carita de vampiro o de bruja, y se van tan felices, aunque tampoco desprecian unas castañitas asadas, eso es cierto.
11 comentarios:
Pues yo me quedo sin duda alguna con las castañas. Esto de hacer todo a lo americano no me gusta nada.Soy de reyes magos y castañas. Un beso grande
Estamos totalmente de acuerdo, Deray!
Besos!!
prefiero las castañas
Besos
Con las castañas, sin dudarlo.
No me gusta nada la moda de ahora.
Besos, guapa.
Bueno, veo que somos todas de la misma opinión.
Pero cómo se va a comparar?
El olor de las castañas asadas, en las ciudades, es el olor del invierno: acogedor, cálido, apetitoso,...
Al menos es así para mí. Espero que continúe siéndolo mucho tiempo!
Besos!!
Castañas, sin duda. No soporto que nos tengamos que quedar a la fuerza con tradiciones que no son nuestras ni tienen sentido en nuestra cultura. Ni siquiera sabemos pronunciarlo!!!!
Donde esté nuestra castañada, que se quiten los jalogüins ;)))
Besos.
Otra de las mías!!!
Isabel, eso de los jaloguins me ha encantado, jajaja!!!
No hay color!
Besos!
Bueno, yo voy a romper una lanza (se dice así?) por la fiesta de Halloween y por la calabaza. La una porque es eso, una fiesta, y bienvenidas sean. Tanto si es americana como si no lo es y en este caso, además no lo es, norteamérica solo la ha hecho popular, pero sus raíces son celtas.
Por otro lado, la calabaza tiene propiedades antioxidantes.Disminuye el colesterol y ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
Me encantan las castañas también, mucho, y además también tienen propiedades.
No hace falta eliminar ninguna si ambas cosas son buenas.
Un abrazo.
Pues yo me quedo con nuestra entrañable castañera y sus ricas castañas. Y por supuesto los panillets -que están de muerte!!!- Como dicen por aquí... no me gusta esa fiesta tan comercial. Lo suyo es comer dulces, castañas y boniatos con un buen vinito dulce y contar historias de muertos y aparecidos hasta el amanecer, pues así ha sido como siempre hemos acompañado a las ánimas en su caminar por la tierra en esa noche de difuntos.
¿Recordáis el miedo que pasábamos de pequeños con esas historias en esta noche especial? ¡Esa sí era una verdadera noche de brujas y difuntos! jejeje...
Mil besitos wpetona,
Leonor
Veras, Sue:
A mí me encanta la calabaza asada. Es uno de los descubrimientos que hice cuando vine a vivir a Valencia. Pero cuando me decanto por las castañas, en realidad muestro mi disconformidad con la invasión norteamericana que nos arrasa. Por supuesto que que gusta la tradición celta! De hecho creo que seguramente nuestra fiesta también derive de la suya, pero como imagen, me quedo con la castañera!!
Besos!!
Yo me quedaría con las castañas, pero los niños con los que trato a diario prefieren las calabazas, así que no me queda otra que pintarles la carita de vampiro o de bruja, y se van tan felices, aunque tampoco desprecian unas castañitas asadas, eso es cierto.
Saludos.
Publicar un comentario